Juventud Con Una Misión (JuCUM) de Corrientes Capital celebró su 8º Seminario de Adoración, Música y Culturas entre los días 21 al 23 de Julio con el propósito de capacitara los creyentes que están involucrados en el área de la música en sus congregaciones.
“Un músico puede tocar un instrumento, pero sólo un adorador puede tocar el corazón de Dios”, fue el lema de este 8º Seminario de Adoración, Música y Culturas llevado a cabo entre los días 21 y 23 de Julio.
El propósito de este seminario, que se celebra durante el mes de Julio de cada año, es bendecir a los músicos y cantantes de las iglesias de la provincia, capacitándolos tanto en aspectos técnicos como ministeriales de este ámbito.
Además, cada año se escoge un estilo musical diferente con el cual se trabaja y aborda desde el punto de vista de la cultura, mostrando así el corazón de Dios para todas las naciones de la tierra. El turno este año fue para el estilo Batucada, música consistente en instrumentos de percusión que proviene de las culturas africanas.
Alrededor de 20 seminaristas, entre estudiantes y líderes, provenientes de Corrientes Capital, Chaco, San Cosme y Paso de la Patria, fueron parte de esta actividad. Sus actividades giraron en torno a tiempos de adoración y búsqueda de Dios, charlas apuntadas al carácter y corazón del músico: El corazón del artista, el servicio, el Espíritu Santo.
Además, tuvieron talleres de teoría musical: Tiempos y pulsos, ejercicios de ritmo, cómo ensamblar instrumentos, entre otros. Por las tardes, se avocaron a realizar talleres prácticos específicos de guitarra, bajo, percusión y canto.
Para finalizar este seminario, se llevó a cabo un culto de celebración en el que líderes y estudiantes realizaron una presentación especial de Batucada, se compartieron testimonios de la experiencia vivida y como broche de oro, el director del Instituto CanZion de Resistencia, Javier De Jesús, ministró la Palabra de Dios a los presentes, enfocándose mayormente en el corazón de adoradores que Dios busca en nosotros.
Eunice Saracho, una de las integrantes del equipo de JuCUM, nos comentó: “Dios fue fiel. En este seminario Dios ministró muchos los corazones de las personas que tomaron el seminario, recibieron lo que estaban necesitando en el tiempo justo. También pudimos ver como equipo la fidelidad de Dios, en la provisión, nuestro trabajo juntos y la comunicación.”
