- Información Personal
Nombre: Eunice Saracho
Edad: 24 años
Estado civil: Soltera
Lugar de origen: Tucumán, Argentina
Ministerios en que trabaja: Escuelas de Discipulado y Entrenamiento, Comunicaciones, Alabanza y Cocina
Tiempo en JuCUM: 1 año y 1 mes
- ¿Cómo era tu vida antes de entrar en JuCUM?
Estudiaba en la facultad, servía en mi iglesia en el equipo de alabanza y en el ministerio con adolescentes. En general, mi vida espiritual era monótona, no dedicaba tiempo a estar con Dios, aunque hacía muchas actividades para Él.
- ¿Cómo llegaste a JuCUM Corrientes?
Un equipo del Ministerio de Arte de esta base visitó mi iglesia en el año 2009 para dar un seminario de teatro y danza. Desde ese momento sentí el deseo de hacer la escuela de discipulado y entrenamiento.
- ¿Cómo ves que tu vida ha cambiado desde entonces?
He crecido mucho en mi dependencia de Dios, teniendo su guía en todas mis decisiones. Me di cuenta que la vida cristiana no se trata solo de una reunión de domingo sino de toda una vida en Dios.
- ¿Cómo te sientes siendo misionera?
Me siento bien en invertir en las demás personas. Sé que me la juego por Dios y sé que cuando muera podré decirle que hice lo que sabía que Él demandaba de mí.
- El momento como ‘Jucumero’ que nunca te vas a olvidar:
Cuando llegué a la misión, no tenía recursos económicos, pero Dios fue supliendo cada necesidad en el día a día.
- Menciona algo del carácter de Dios que te impresiona.
Su amor.
- ¿Cuál es tu comida favorita?
Matambre al verdeo con papas.
- ¿A qué lugar del mundo quieres ir?
Me llama la atención Israel.
10¿Dónde te ves en 5 años?
Me veo capacitando gente para la obra misionera.
11 Si estuvieras abandonada en una isla y pudieras elegir una persona para llevar contigo ¿Quién sería y por qué?
A mi hermana, porque sé que en las situaciones que estemos seguiríamos avanzando.
12Tu casa se está incendiando, todas las personas y animales están a salvo ¿Qué sería la primer cosa que rescatarías?
No rescataría nada porque no arriesgaría mi vida por cosas materiales.
13Lema o frase de tu vida personal.
Lo hecho, hecho está. No vale la pena lamentarse por el pasado.
